VI.- La Cita

Recuerdos: Fue difícil acercarme por primera vez, note en ti una mirada de desconfianza absoluta, cuando te salude aquel día, fuiste fría al responder y mucho mas al saber que sabia tu nombre, pero poco a poco me gane tu confianza, me hiciste sentir tu aprecio por querer conocerte, te sentiste alagada, por saber que alguien se interesaba en ti, aceptaste mi invitación a aquella cita, que para ti no lo era, solo por la curiosidad de saber quien era yo exactamente. Aquella tarde de jueves, me preguntaste tantas cosas sobre el porque de mi acercamiento, y entre respuestas, siempre cambie el tema, no podía decirte que me gustabas, que aparecías en mis sueños desde aquel día que te vi en el comedor, cuando me impactaste, ese día de hace tanto tiempo en el que solo fuiste una ilusión distante, me maldigo mil veces por no haber tenido el valor de hablarte antes, solo lo hice al saber que te podía perder. Me dijiste que sabias que te miraba, que también sabias mi nombre, y que me encontrabas simpático, no sabes cuanta esperanza me dieron esas palabras, tenia algo a mi favor, luego de comer aquel helado en el muelle, me contaste de tu vida, y de como veías tu futuro, que te gustaba, con que soñabas, me demostraste plena confianza al abrirme tu corazón, luego de contarte mis anécdotas y de abrirte mi alma, comprendí que tu eras para mi. Recordé aquellos libros que leí donde sheccid, aquella princesa que hizo cambiar a un hombre y superarse. O a dana aquella mujer sublime, perfecta en esencia, única y virtuosa. Solo pienso en ti.